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Tener una hermandad en la que no hay gente suficiente como para organizar al menos una mazmorra es un problema que nadie quiere, por eso tarde o temprano la mayor parte de las hermandades
terminan por reclutar nuevos miembros y eso si no se hace correctamente provoca más problemas de los que resuelve.
A fin de cuentas ¿cuántos miembros necesita la hermandad para poder mantenerse en correcto funcionamiento?, si una hermandad sólo necesita 30 miembros no tiene sentido seguir reclutando por
encima de ese número, eso al menos en teoría, porque en la práctica las cosas nunca funcionan así.
Hay que recordad que los personajes sólo son el reflejo de la persona que los maneja, y esas personas en cualquier momento pueden decidir que no quieren jugar más o que van a tomarse un descanso,
de la mañana a la noche desaparecen y no se vuelve a saber nada de ellos. Pero sus personajes siguen ahí.
Esto es algo que he discutido ya con mucha gente, ellos mantienen que los personajes pueden quedarse ahí por los siglos de los siglos y yo opino que eso es malo para la hermandad. Es malo para la
imagen de la hermandad porque alguien que esté pensando en entrar puede mirar en la armería la actividad de los miembros y comparar con el nº de estos que hay en total.
A mi si alguien me dice que entre en una hermandad donde se conectan de media 20 personajes a lo largo de la semana pero que tiene 700 miembros en total ni siquiera me lo pienso. Seguramente esa
hermandad tuvo su momento de gloria pero este ya pasó, y comparando los que quedan vivos con la cantidad de desaparecidos en combate al final llego a la conclusión de que los pocos que quedan
terminarán por irse también.
Puede que me equivoque y que en realidad esa hermandad se esté recuperando porque hasta hace poco sólo conectaban 4, pero la apariencia sigue siendo la misma.
Habrá quien diga entonces que lo mejor sería expulsar de golpe a aquellos que llevan mucho tiempo sin conectar y de quienes no se sabe nada, pero eso sería por aun porque daría pie a que
cualquiera que haya entrado hace poco piense que se expulsa a la gente sin motivo y decida marcharse para evitar malos rollos. Incluso alguien que entre después de una expulsión masiva podría
mirar el registro de la hermandad y pensar que en una hermandad donde se valora tan poco a los miembros no merece la pena quedarse.
¿Cual es la solución para evitar estos problemas?, mantener un censo estable.
Con lo de censo estable me refiero no al nº de miembros sino al de cuentas de juego, basta con elegir un número que nos parezca adecuado y ajustarse a el. Yo por ejemplo he elegido el 150.
De esta forma sé que el nº ideal de jugadores en mi hermandad es de 150, por eso cuando recluto sé exactamente cuantos nuevos jugadores debería de admitir hasta llegar a esa cantidad, si en algún
momento recluto por encima de ese número también sé cuantos personajes tengo que expulsar para poder mantenerme en la cantidad adecuada.
Este sistema tiene de bueno que aunque el nº de cuentas se mantiene siempre igual el nº de jugadores inactivos va descendiendo poco a poco. Hoy entra 1 nuevo jugador y yo elijo a uno que lleva
mucho tiempo sin conectar y de quien no sé nada, a ese jugador le expulso todos los personajes, pueden ser 1 lo mismo que pueden ser 5 pero aunque el total de personajes en la hermanad disminuye
el número de cuentas se mantiene igual y el número de jugadores activos aumenta.
Yo lo considero una de las cosas más importantes que tiene que saber hacer un maestro de hermandad, manejar el nº de miembros. Yo lo hago es esta manera que os he comentado pero lo que me
gustaría saber es si vosotros hacéis algo parecido y sobre todo cómo lo hacéis así que os lanzo la pregunta: ¿Mantenéis una población estable en la hermandad?
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Hay quien se ha extrañado por el nº que elegí, 150... parecen muchos pero en realidad no son tantos. Tened en cuenta que estoy hablando en todo momento de una hermandad que tiene más de 5 años, es decir que se fundó mucho tiempo antes de que las hermandades tuviesen banco, beneficios o niveles. En aquella época los jugadores saltaban de una hermandad a otra como si tal cosa y en sus mejores momentos llegamos a tener más de 300 personajes en la hermandad. Cuan después de un par de años me di cuenta de que muchos de ellos llevaban demasiado tiempo sin conectar y decidí expulsarlos ya tenía un problema encima, era necesario hacer como decía arriba e ir expulsando apenas unos pocos más de los que entraban, por eso el nº final se redujo a más o menos la mitad del total. Posiblemente con el tiempo se vea reducido de nuevo, pero mientras tanto es al que me ajusto. |
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